En las primeras horas de la madrugada partimos de la comunidad de Puina para subir las laderas de los Andes Tropicales. Acostumbrados a las alturas superiores a 4500 metros, el grupo de campesinos originarios Quechua avanza a un ritmo que apenas podemos seguir en la lluvia fría y los vientos helados. Normalmente subiríamos a los bosques de altura para volver luego a la comunidad con la leña recolectada en los queñoales. Esta vez en cambio no iremos a cortar los árboles, iremos a plantarlos.
En enero de 2018 los comunarios de Puina, Keara junto con la Asociación Armonía y personal del parque nacional Madidi plantaron 25 500 platines de Queñoa e otras especies nativas en la región alto andinda del Madidi.
Las Queñoas o Lampayas -arbolitos tamaño pequeño a mediano tamaño – dan la arquitectura a los bosques que alcanzan mayor altitud sobre el nivel del en nuestro planeta. Aproximadamente 20 especies de este grupo de arbolitos existen en Bolivia (todas pertenecen al género Polylepis) y cuyos bosques están fuertemente fragmentados y degradados.
Las aves más amenazadas del Corredor Madidi-Cotapata-Pilon Lajas, una de las regiones más diversas del planeta
Las comunidades de Puina y Keara se encuentran en la parte alto andina del parque nacional Madidi, una de las áreas protegidas más biodiversas del planeta. Esta región cobija algunos de los Queñoales de mayor importancia para la protección de la Remolinera Real (Cinclodes aricomae) y el Torito Pecho Cenizo (Anairetes alpinus); dos de las especies de aves más amenazadas del corredor Madidi-Cotapata-Pilon Lajas.
Las comunidades locales Puina y Keara, el área protegida Madidi y la Asociación Armonía reforestaron 25 500 plantines de Queñoa y otras especies nativas
En enero de 2018 los comunarios de Puina junto a Armonía plantaron aproximadamente 15 900 platines de Queñoa. A pesar del difícil terreno y el clima inclemente, decenas de familias respondieron al llamado de ésta mink´a – tradicional trabajo comunal Quechua – y treparon a los parches de bosques en los alrededores de Puina.
Unas semanas más tarde, miembros de la comunidad de Keara, junto con guarda parques del Parque Nacional Madid y Armonía continuaron plantando 9 560 plantines de Queñua (y otras especies de plantas nativas como la Kiswara). Varias generaciones de actores locales – hombres, mujeres y jóvenes – trabajaron en los paisajes escarpados para restaurar los parches de bosques.
Esta es la iniciativa de restauración de los bosques de Polylepis de mayor impacto realizado en Bolivia hasta la fecha
Armonía viene organizando talleres de educación ambiental y actividades de reforestación de bosques de Queñoa desde el año 2004 en diversas regiones de los Andes bolivianos (e.g. las áreas protegidas Tunari en Cochabamba; y Cotapata y Madidi en La Paz).
A lo largo de los últimos 14 años Armonía ha sido una de las instituciones que más fuertemente ha trabajado para restaurar los bosques de Queñoas en Bolivia. Con 25 500 platines plantados, la reforestación de 2018, es, sin duda la iniciativa de restauración de los bosques de Polylepis de mayor impacto realizado en Bolivia hasta la fecha.
Las comunidades locales y el área protegida Madidi asegurarán la continuidad de los trabajos de reforestación a largo plazo
Con el apoyo de Armonía los puineños y miembros del cuerpo de protección del Parque Nacional y Área natural de manejo integrado Madidi construyeron un vivero para continuar produciendo plantines.
El reto actual es que ambos actores continúen produciendo plantines de especies nativas, para asegurar la continuidad de los labores de restauración de estos bosques altoandinos.
– recalcó Monica Sancristobal, coordinadora del proyecto Bosques de Polylepis en Armonía.
El Proyecto Bosques de Polylepis es financiado por la Alianza para los Ecosistemas Críticos (CEPF) y por el Fondo de Conservación de Especies Mohamed Bin Zayed. Este proyecto es ejecutado por la Asociación Armonía en coordinación con el SERNAP y las comunidades locales Puina y Keara. Socios estratégicos para la implementación del proyecto son Fundesnap y el Museo Alcides d’Orbigny de Cochabamba.
El Proyecto Bosques de Polylepis es financiado por la Alianza para los Ecosistemas Críticos (CEPF) y por la contribución del Fondo de Conservacion de Especies Mohamed Bin Zayed.
Hemos logrado excelentes resultados para proteger los bosques de Polylepis y para empoderar las comunidades originarias Quechua de la zona, sin embargo necesitamos su ayuda para expandir más los bosques de Polylepis. Apoye por favor nuestro trabajo para salvar uno de los ecosistemas más amenazados de los Andes Tropicales.